El pasado mes, la SIC lanzó la Guía sobre diversidad sexual y enfoque e identidad de género en las relaciones de consumo”, que tiene como objetivo fundamental proteger los derechos de los consumidores desde una perspectiva de no discriminación. Su importancia radica en proyectar los derechos del Estatuto del Consumidor en contextos que involucran la igualdad de personas vulnerables por género, identidad de género y diversidad sexual.
Así, instruye a los empresarios a aplicar una debida diligencia para evitar prácticas discriminatorias, fomentando relaciones de consumo respetuosas de la dignidad y los derechos humanos.
Entre sus recomendaciones principales se encuentra:
- $No incluir en la publicidad mensajes discriminatorios o sexistas basados en estereotipos de género.
- $Contar con mecanismos de atención al cliente con enfoque diferencial que consideren la vulnerabilidad de mujeres y personas de la comunidad LGBTIQ+.
- $No negar injustificadamente el acceso a productos o servicios o dar tratamiento diferente a un consumidor basado en su identidad de género u orientación sexual.
La materialización de estas recomendaciones se puede ver, por ejemplo, en entender que los productos cosméticos pueden ser usados por un público más allá del femenino, que cualquier clase de juguete puede ser usado por niñas y niños independientemente de su género, entre otras.
